HY-PRO ADITIVOS PH- (Grow)
LO MEJOR ES UNA MEZCLA DE SUSTRATO Y NUTRIENTES LIGERAMENTE ÁCIDA
Los factores esenciales que intervienen en la determinación del pH del sustrato son la alcalinidad del agua, los componentes del sustrato, el tipo de abono y las especies vegetales cultivadas. Conocer todos los factores implicados es el primer paso para gestionar el pH del sustrato. Principalmente es la combinación de la alcalinidad en el agua de riego y la reacción del fertilizante soluble en agua lo que afecta al pH del sustrato. El pH afecta a la movilidad de los nutrientes; para evitar desequilibrios de pH, es necesario instituir una prueba de pH para evaluar el pH del sustrato de forma regular. Se recomienda realizar un análisis exhaustivo de todos los insumos de producción previos a la plantación, incluidos la fuente de agua, el fertilizante y el sustrato del invernadero.
¿CÓMO AFECTA EL PH A SUS CULTIVOS DE INVERNADERO?
Las plantas necesitan luz, dióxido de carbono, agua y nutrientes minerales para producir azúcares (alimento) y crecer. El agua se suministra a través del sustrato y contiene elementos minerales disueltos. La movilidad de estos nutrientes viene determinada por el pH del sustrato. Se ven especialmente afectados aquellos nutrientes que las plantas necesitan en pequeñas cantidades, llamados micronutrientes u oligoelementos. Cuando el pH es demasiado bajo, los micronutrientes se vuelven más móviles y se absorben en exceso de lo que la planta necesita, lo que da lugar a este potencial de toxicidad. Cuando el pH es demasiado alto, los micronutrientes son menos móviles y la planta no puede absorber lo suficiente, lo que provoca carencias.
Su objetivo como cultivador de invernadero es mantener un pH estable durante toda la vida del cultivo. No es una tarea fácil, ya que muchos factores pueden afectar al pH del sustrato de cultivo. El pH puede subir o bajar en cuestión de semanas y si esperas a que se desarrollen síntomas de deficiencia o toxicidad, ya has puesto en peligro la salud del cultivo y tus beneficios. Cada especie vegetal tiene un pH preferido; en general, el rango óptimo para un crecimiento máximo es de 5,2 a 6,2. Las plantas experimentan el pH a través de sus raíces y los pelos radiculares experimentan cualquier cambio que se produzca en este entorno, como variaciones de humedad, aire o concentraciones de solutos en la solución del sustrato.
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